PETRÓLEO

ARGENTINA Y EL ZIGZAG PETROLERO

“Zigzag: línea que en su desarrollo forma ángulos
alternativos, entrantes y salientes”. DRAE.

Por Malú Kikuchi



Los estallidos político sociales de África y Medio Oriente hacen temblar al mundo. No es sólo por solidaridad con los pueblos que luchan contra tiranías de las que occidente es en parte responsable, sino que la preocupación mayor, se debe al precio del barril de petróleo. Precio en alza, que nos puede afectar.

Como en casi todos los órdenes a lo largo de la historia argentina, la política con respecto al petróleo, ha sido zigzagueante. A veces se ha hecho desde un sano nacionalismo, y a veces se lo ha usado para hacer enfermos negocios; en ocasiones se ha abierto al capital extranjero con las mejores intenciones y otras, esperando los mejores intereses personales.

Pequeña crónica del petróleo en Argentina.

Hechos. 11/12/1907, en Comodoro Rivadavia, ínfimo pueblo de la inmensa y despoblada Patagonia, los expertos Humberto Beghin y José Fuchs, buscando agua bebible que no existía en la zona, encontraron petróleo. Comunicaron el descubrimiento al gobierno central.

“Olía mal. Era un olor oscuro y pegajoso, el aliento viscoso de una borrachera de siglos que la tierra dejaba escapar por una abertura ancha y profunda.” Sigue oliendo mal. En todo sentido.

Hechos. El 3/6/1922, finalizando el 1º gobierno de Yrigoyen, se creó YPF, siendo su presidente hasta 1932, el general Enrique Mosconi, quien sostenía que, “entregar nuestro petróleo era entregar nuestra bandera”.

Hechos. Perón, gran admirador de YPF, en 1954, 2º mandato, debido a las malas condiciones económicas del país y a la deficiente productividad de YPF, firmó un contrato con la Standard Oil de California.

Hechos. Este contrato fue una de las causas de su derrocamiento. En 1957, ya fuera del poder, Perón escribió un artículo donde explicaba que el contrato estaba ad referendum del congreso, y lo justificaba diciendo que de esta manera Argentina ahorraba los US$350 millones que le pagaba por año a Gran Bretaña por la importación de petróleo. La Revolución Libertadora de 1955, puso fin al contrato.

Hechos. Al mismo tiempo que Perón firmaba el contrato con la California, el radical Arturo Frondizi publicaba un libro titulado “Política y petróleo”, donde sostenía que el petróleo era nuestro y sólo nosotros podíamos extraerlo, aunque fuera con cucharitas de café.

Hechos. Arturo Frondizi, UCRI, con el voto peronista, llegó a la presidencia en 1958. El 24 de julio de ese año, con Arturo Sábato como presidente de YPF, Frondizi lanzó “La batalla del petróleo”.

Hechos. Permitió que las empresas petroleras introdujeran al país todos los elementos necesarios para la exploración, sin pagar impuestos y permitió que pudieran sacar del país las ganancias libremente. El petróleo extraído, se entregaba a YPF. Fue un éxito

Hechos. El 29 de marzo de 1962, los militares derrocaron a Frondizi. Para entonces, Argentina, por primera vez en su historia, se autoabastecía de petróleo. En 1963, ya fuera del poder, Frondizi escribió, con prólogo de Arturo Sábato, “Petróleo y nación”. Difería mucho del anterior.

Hechos. En 1963 asume la presidencia Humberto Illia, UCR del Pueblo. En 1965 deja sin efecto los contratos con las empresas petroleras extranjeras, a un costo altísimo para el país. El petróleo vuelve a ser sólo nuestro … y dejamos de autoabastecernos.

Hechos. En 1992, siendo presidente Carlos Menem, PJ, decide privatizar YPF. La ley no prospera en el congreso porque los radicales la rechazan y los peronistas se hacen los distraídos. Menem necesita el apoyo de Kirchner, por ese entonces, gobernador de Santa Cruz.

Hechos. Kirchner, además de ser gobernador de una provincia petrolera, era el presidente de la OPHEPI, Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos, compuesta por Salta, Formosa, La Pampa, Mendoza, Neuquén, Chubut, Santa Cruz.

Hechos. Con el entusiasta apoyo de Kirchner y toda la OPHEPI, más los votos en el congreso, de Oscar Parrilli (elocuente discurso a favor de la privatización, que vale la pena leer), Cristina Fernández de Kirchner, Icazuriaga y sigue la lista, YPF se privatizó. Pasó a ser Repsol YPF.

Hechos. Las provincias de la OPHEPI recibieron millonarias regalías, entre ellas los famosos y desaparecidos US$ 560 millones (que hoy deberían ser más de US$1.000 millones) a Santa Cruz.

Hechos. Al dejar Menem el poder en diciembre 1999, Argentina no sólo se autoabastecía, también exportaba petróleo. Hay que recordar que Argentina no es un país petrolero, es un país con petróleo. Es muy diferente.

Hechos. Febrero 2007, el entonces presidente Kirchner, flanqueado por el secretario general de la presidencia, Oscar Parrilli, discurseaba diciendo: “Sabemos del genocidio que sufrió la industria petrolera, la increíble privatización…” ¿? Sin comentarios.

Hechos. Hoy, YPF está conformada por un 79,84% en manos de Repsol (capital español), el 15,46% de acciones son del grupo Petersen de la familia Ezquenazi (capital argentino) y el 4,69% son “free float”. Con los precios del petróleo fijos, en Argentina, la exploración es nula.

Hechos. En 2011 importamos 711% más petróleo que en el 2003. Cuando comenzó la era K, Argentina importaba petróleo por valor de US$548 millones al año, en 2010 lo hizo por US$4.443 millones. Aumentó la demanda, pero al mismo tiempo disminuyó la producción en un 7%.

Con el tema de Medio Oriente y los problemas de los países productores de petróleo, el precio sube y seguirá subiendo. La pregunta es ingenua: ¿quienes vamos a pagar ese aumento? ¿Quienes pagamos el 711% más de importación de petróleo en estos últimos 8 años?

Como siempre, como todo, nosotros, los ciudadanos con nuestros impuestos. Todo debido (no confundir el uso del verbo “deber” con el apellido De Vido) a una populista y pésima política energética, que hoy finge ser barata y ya nos resulta un 711% más cara de lo que debiera ser.

Por ahora, y en un futuro cercano, parece que nada va a cambiar. Pero… Félix Luna decía: “Esto indica que en política las cosas que en algún momento parecen seguras, nunca lo son del todo”. De las encuestas se puede decir lo mismo.

Recuerde, este año, votamos. De nosotros depende.